Cuidados para una piel grasa

Cuidados para una piel grasa

Sea cual sea tu tipo de piel (grasa, seca, mixta, normal o sensible), lo importante es que la conozcas a fondo para poder protegerla y darle los cuidados que se merece.

Acertar en la elección de los productos que te aplicarás es tan importante como la constancia diaria para que tu piel luzca firme y radiante. Hoy nos centraremos en la piel grasa, cuales son sus características, como debemos cuidarla y algunos tips y consejos para mimarla día a día.

¿Tu piel es grasa?

Brillos, poros dilatados, puntos negros, espinillas y granitos son señas de identidad de la piel grasa. El exceso de sebo es el responsable de que este tipo de pieles presente ese aspecto y experimente una pérdida de firmeza notable a más temprana edad.

Sin embargo, y a diferencia de otro tipo de dermis, las pieles con tendencia grasa son más resistentes a los agentes externos y presentan menos arrugas y líneas de expresión. Aun así, es un tipo de piel que exige unos cuidados específicos para que se mantenga bien.

¿Cómo cuidar la piel grasa día a día?

Si sigues este sencillo ritual diario, lograrás regular el exceso de sebo y tu piel se verá menos brillante y más tersa.

  • - Limpieza facial diaria. Este paso es fundamental y se debe hacer dos veces al día: por la mañana y por la noche. Las soluciones micelares (ya sean en agua, gel o aceite) son una excelente opción para llevar a cabo este ritual de higiene facial diaria.
  • - Limpieza facial semanal. Como en el caso anterior, de forma periódica, debemos realizar una higiene facial más profunda siguiendo dos simples pasos: exfoliación e hidratación intensiva con una mascarilla.
  • - Brillos y flacidez a raya. Para controlar los brillos, visibles especialmente en la frente y la nariz, las emulsiones de efecto mate son una óptima solución. Además, para prevenir y frenar la flacidez, te recomendamos soluciones dermacosméstica que ayuden a producir colágeno ya que resultan muy efectivas para reafirmar el cutis.
  • - Hidratación ligera. Por otro lado, las pieles grasas también pueden deshidratarse, por lo que es aconsejable que utilices una loción de textura ligera y sin aceites (también denominadas en inglés, oil free) para evitar que se engrase más. Te aconsejamos probar las ampollas de proteoglicanos liposomas de MartiDerm® específicas para pieles grasas y/o reactivas.

Algunos tips y consejos extra

 Además, algunos hábitos complementan y potencian los resultados de tu rutina de belleza para que tu piel se vea espléndida.

  • Alimentación. Nuestra piel refleja aquello que comemos, por lo que nuestra piel requiere una alimentación específica. En el caso de la piel grasa, te recomendamos hidratar muy bien tu piel. Ingiere 2 litros de agua al día. Toma alimentos ricos en Omega 3 (aguacate, salón o atún), lo cuales tienen propiedades antiinflamatorias. No olvides incorporar la fibra en tu dieta. Estos alimentos son ideales para que el cuerpo elimine toxinas, y además evitan la sobreproducción de grasa.
     
  • Evita tocarte el rostro con las manos sucias y tampoco lo hagas con los granitos, para evitar la inflamación de la piel. También es importante que tengas las manos limpias antes de aplicarte cualquier producto.
     
  • Los cosméticos también juegan un papel importante en el cuidado de las pieles con tendencia grasa. Elige productos sin aceite y maquillaje de textura en polvo, ya que al ser absorbente, lograrás camuflar los brillos. ¿Un truco? Utiliza siempre una brocha para aplicarte el rubor en las mejillas y, acostumbra a llevar toallitas en el bolso: te ayudarán a eliminar los brillos faciales y la grasa del rostro sin estropear el maquillaje.

Si llevas a cabo todos estos cuidados específicos, estos hábitos pasarán a formar parte de tu rutina diaria y te ayudarán a frenar el exceso de grasa y a recuperar la elasticidad natural de la piel.

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