Deporte y calor: ¿una mala combinación?

Deporte y calor: ¿una mala combinación?

Hace un día espléndido y tienes tiempo suficiente para disfrutarlo practicando el deporte que más te gusta. Pero no te das cuenta del calor que hace y, tras los primeros minutos de esfuerzo físico, empiezas a experimentar pesadez en las piernas, sudoración, palidez y finalmente sensación nauseosa o mareo… ¡Cuidado! Es posible que estés sufriendo un golpe de calor.

Este síndrome se caracteriza por el incremento de la temperatura corporal como consecuencia de una mala adaptación del organismo a una exposición prolongada al sol, a altas temperaturas o a la realización de un esfuerzo físico intenso en ambientes calurosos, muy húmedos o con poca ventilación.

Se produce cuando, al practicar deporte, el organismo no se termorregula con la rapidez que el esfuerzo físico requiere e intenta disipar calor lo más rápido posible. Para ello, aumenta la vasodilatación y la excreción de líquidos como el sudor. Esto supone que sea más fácil que se produzcan desequilibrios hidro-electrolíticos y los mareos típicos de la comúnmente llamada «insolación» o «golpe de calor».

 

Deporte y verano. Factores que tener en cuenta

Cuando practiquemos deporte durante el verano deberemos tener en cuenta una serie de factores que son importantes para prevenir o mitigar el efecto de un posible golpe de calor:

  • La temperatura exterior: ambientes excesivamente calurosos pueden favorecer la deshidratación y que los barorreceptores orgánicos encargados de adaptar nuestra temperatura no funcionen de forma correcta. Esto es: en un ambiente con poca agua el cuerpo no conseguirá refrigerarse con la rapidez que requiere el esfuerzo porque recibirá como datos que la concentración de agua está por debajo de lo habitual. Así, intentará adaptarse con mayor rapidez y esto significa que nuestro organismo se expondrá a condiciones de riesgo.
  • Hidratación corporal: la concentración tisular de agua influye directamente, porque marcará nuestro máximo de esfuerzo que realizar.
  • Nivel de esfuerzo físico: en ambientes con una temperatura más agradable podemos intentar realizar esfuerzos mayores porque desde el punto de vista psicosomático nos vemos con mayor probabilidad de éxito. No adaptar de modo correcto nuestras características individuales al esfuerzo realizado es un error que podríamos pagar caro con un cuadro de deshidratación que puede dar lugar no solo a mareos, sino también a hipotensión, taquicardia y fallo orgánico.

 

Recomendaciones para realizar el deporte que más te gusta

Estas medidas se basan en la reposición adecuada y continuada de líquidos durante el esfuerzo físico. Ten siempre en cuenta lo siguiente:

  • Bebe líquidos: la hidratación individual necesaria tiene en cuenta el peso, pero también las pérdidas. Bebe en más cantidad y de forma continua, no solo por el esfuerzo que vas a realizar, sino también por el sudor que vas a perder.
  • Evita las temperaturas altas y adecúa el nivel de esfuerzo físico.
  • Descansa: no te olvides de parar en zonas frescas y ventiladas para que a tu cuerpo le sea más fácil adaptarse a las altas temperaturas. Y recuerda que dormir bien tiene efectos positivos en nuestra piel.
  • Protégete con ropa ligera: no utilices prendas ajustadas y asegúrate de que sean transpirables para que la evaporación de la sudoración sea progresiva, así como también la pérdida de calor por la energía consumida.
  • Come liviano: una alimentación muy copiosa con alimentos que requieran digestiones largas puede afectarte e incrementar el riesgo de padecer un cuadro de golpe de calor. En estos casos, la sangre se deriva en mayor cuantía al sistema digestivo durante más tiempo y es necesaria una ventana de tiempo mayor de reposo entre la comida y el esfuerzo físico para evitar el pico de vasodilatación. Si vas a practicar deporte, mejor come ligero.

Sin embargo, no queremos que te quedes con la idea de que deporte y verano son enemigos. Si sigues estos consejos, escuchas a tu cuerpo y aplicas el sentido común, podrás disfrutar de tu deporte favorito incluso en la estación más calurosa del año.

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