Seca, mixta, grasa… Y tú, ¿qué tipo de piel tienes?

Seca, mixta, grasa… Y tú, ¿qué tipo de piel tienes?

¿Cuántas veces habrás oído hablar de piel seca, mixta, grasa… y tú sin saber de qué va todo esto? Aquí te dejamos algunas pistas para conocer qué tipo de piel tienes y que necesidades requiere:

  • Seca: se descama con facilidad y a menudo tiene grietas. Como tiene menos grasa, retiene menos agua y está más expuesta a las agresiones del exterior. ¿Cómo debes tratarla? La prioridad de tus cuidados debe ser la regeneración reforzando además la hidratación. Una piel bien hidratada es una buena barrera de defensa J
  • Grasa: se caracteriza por tener brillos, poros ensanchados, puntos negros o acné. Pero, ¡tranquila! También tenemos solución para este tipo de piel. En este caso, tus cuidados deben focalizarse en regular su producción de grasa, utilizando productos astringentes y limpiadores.
  • Mixta: si al observarte la cara identificas diferentes tipos de piel, no es que no lo estés haciendo bien… ¡es que tienes la piel mixta! Por lo general, la llamada zona T (frente, nariz y mentón) se observa más grasa, pero en el resto del rostro, en las mejillas, la piel es normal o seca. La solución está en tratar las diferentes zonas según sus necesidades.
  • Normal: si tu piel no brilla, no se descama ni está seca, es firme y uniforme, y además tiene buena hidratación, ¡es que estás de suerte! Tienes una piel normal. Pero eso no significa que no debas cuidarla para mantener su equilibrio.

Ahora que ya sabes qué tipo de piel tienes, ¡solo te falta cuidarla!